UC - Críticas
| País: USA. Año: 2013. Duración: 129 min. Género: Thriller cómico.
Dirección: Michael Bay. Guion: Christopher Markus y Stephen McFeely; basada en “The magazine articles”, de Pete Collins. Producción: Donald De Line, Michael Bay e Ian Bryce. Música: Steve Jablonsky. Fotografía: Ben Seresin. Montaje: Thomas Muldoon y Joel Negron. Diseño de producción: Jeffrey Beecroft. Vestuario: Deborah Lynn Scott. Distribuidora: Paramount Pictures Spain.
Estreno en España: 30 Agosto 2013. |
Interpretación: Mark Wahlberg (Daniel Lugo), Dwayne Johnson (Paul), Ed Harris (Ed), Anthony Mackie (Adrian), Bar Paly (Sorina), Ken Jeong (Johnny), Tony Shalhoub (Victor), Rob Corddry (John), Rebel Wilson (Robin). |
MUCHO MÚSCULO, POCO SESO
“Dolor y Dinero” es una auténtica gamberrada anabolizada de Michael Bay, director prolijo en cine de acción y que aquí se destapa con un sorprendente giro en su carrera que si bien no abandona el ritmo vertiginoso de ese género, en esta ocasión se adentra de lleno en el humor negro y sarcástico en una combinación llena de excesos narrativos que curiosamente se inspira en hechos y personajes reales (lo que nos recuerda hábilmente durante el metraje convirtiéndole en un gag en sí mismo). La película es una mordaz e irreverente crítica al llamado sueño americano.
SINOPSIS: “Dolor y dinero” nos cuenta la historia de unos culturistas de Florida que planean el secuestro, robo y asesinato de un adinerado empresario. Sin embargo, la víctima no fallece y se recupera en secreto. De hecho, contrata a un detective privado para que localice a sus captores con el propósito de vengarse de ellos.
“Dolor y Dinero” es una de esas películas que se nota que hicieron disfrutar a los que participaron en ella, más complicado será conseguir la misma implicación en el público que la vea, y es que tratándose de una propuesta tan radical conceptualmente (y no me refiero con ello que sea una obra difícil) conectará tan sólo con los espectadores que entren en su juego desde el principio, sino te engancha en los primeros 10 minutos ten por seguro que todo lo que sucede posteriormente te parecerá una auténtica absurdidad.
En mi caso, la película se me queda a mitad camino, no me resulta absolutamente desdeñable porque me seduce el cachondeo riesgoso con que se toma a sí misma, pero tampoco logra divertirme tanto como debería. Su cóctel de cine negro, comedia pasada de rosca y acción desbordada rebosante de violencia, he de reconocer que contiene varios momentos carcajeantes, pero el balance global tal vez quede perjudicado por su metraje excesivo. Otro acierto a apuntar a Bay es conseguir la implicación de todo el reparto, con mención especial para el siempre solvente Mark Wahlberg y consiguiendo que por primera vez Dwayne Johnson “The Rock” realice una buena interpretación, ironizando sobre su propia figura mediática.
